DECORACIÓN NAVIDEÑA
Una decoración de Navidad hecha por los niños
El espíritu navideño nos hace sentirnos más cercanos a los demás y recuperar ese espíritu infantil que dejamos a un lado el resto del año. Y qué mejor forma de hacerlo que adornando la casa junto a los más pequeños.
La decoración de Navidad es una gran oportunidad de reunir a toda la familia para decorar la casa con vuestras propias manualidades, pasando un rato divertido y aprendiendo cuál es el significado de los símbolos navideños más típicos.
Ideas para adornar el árbol de Navidad
En Navidad se decoran puertas, paredes y ventanas con adornos navideños. El árbol navideño es otra decoración principal en todos los hogares. Te proponemos que fabriques con tus hijos vuestros propios adornos de una forma muy sencilla y divertida.
Los símbolos más importantes de la Navidad
Para conocer la decoración navideña, empezaremos por la puerta principal de casa. En muchas viviendas se coloca en la puerta una corona de Navidad con figuras de Papá Noel, bolitas de colores, campanas, lazos, ramas de pino o muérdago, una planta con hojas en forma de pico y frutos rojos que, ¡dicen!, trae buena suerte y simboliza la esperanza.
Las ventanas también se visten de gala por Navidad. En ellas se suelen colgar dibujos realizados por los niños o figuras de espuma, imitando a la nieve, realizadas con plantillas, además de colgar adornos como muñecos de nieve, bolas o Papá Noeles. Adornar las ventanas es una forma de comunicar a los demás que ahí vive una familia con ilusión.
El árbol de Navidad
El árbol navideño es, en muchas casas, el adorno principal. Los hay de diversos tamaños, pueden ser naturales o artificiales, y con más o menos decoración, pero todos se montan con el mismo cariño e ilusión.
Antes de empezar a decorar el árbol de Navidad. Es necesario elegir un lugar agradable y que tenga un enchufe cerca. Una vez escogido y estiradas todas las ramas del abeto, es el momento de decorarlo.
Primero se colocan las luces, de abajo a arriba, distribuyéndolas bien por todo el árbol. A continuación, y con la ayuda de los niños, se colocan, de forma homogénea, los adornos: ángeles, piñas, campanas, lazos, bolas, estrellas, guirnaldas, etc.
Los más pesados se pondrán en la parte de dentro y los más ligeros en las puntas de las ramas. Para terminar, se coloca el adorno más grande y pesado, una estrella, un ángel o incluso un Papá Noel, en la cima del árbol.
Los adornos del árbol de Navidad
Los adornos de Navidad, para colgar en el árbol, las puertas, las paredes, las ventanas o la puerta de entrada, pueden ser "fabricados" por vosotros mismos.
Prueba a hacer una masa de harina de trigo, sal, y agua. Con la ayuda de un rodillo, puedes crear, con los niños, figuras de Papá Noel, estrellas, campanas, Reyes Magos, ángeles, etc. Existen moldes con esos dibujos en cualquier tienda de trabajos manuales. Será muy divertido y educativo personalizar los adornos de Navidad de tu casa. ¡Empieza ahora mismo!
El Belén, Pesebre o Nacimiento
La decoración de Navidad se completa con el Belén, también llamado Nacimiento, Pesebre, Portal o Pasitos, la representación material de las escenas del nacimiento de Jesús y de la visita de los Reyes Magos. Se suelen exponer durante la Navidad en los hogares, iglesias, colegios, instituciones oficiales, escaparates de las tiendas, centros comerciales, etc.
La tradición de poner el Belén se remonta al siglo XIII, cuando San Francisco de Asís reunió a los vecinos de la villa italiana de Greccio en una ermita para celebrar la misa de medianoche. Alrededor de un pesebre, con la figura del niño Jesús moldeado por las manos de San Francisco, se cantaron alabanzas al Misterio del Nacimiento. En el momento más solemne de la misa, aquella figura inmóvil adquirió vida, sonrió y extendió sus brazos hacia el Santo de Asís.
Pero ya antes de la celebración de Greccio existen antecedentes de la representación plástica del nacimiento de Jesús. Han aparecido restos de Belenes en catacumbas romanas y en iglesias y otros lugares ligados al culto cristiano. En cualquier caso, fue a partir del siglo XIV cuando se consolidó por toda Europa la tradición de poner el Belén en Navidad. Y hoy en día se montan con piezas hechas de madera, arcilla, plástico, metal o incluso hielo, en los países nórdicos.
Buen artículo.
ResponderEliminarUn saludo,